¿volveran las oscuras golondrinas?

Esto lo saque de una nota en la revista Lezama, sobre el exilio, y lo escribe una muchacha que se llama Mariana Chaves (exiliada de pequeña con sus padres, durante la dictadura, por distintos paises)

Extranjera en todas partes
En Mexico me decian argentina, y tenias que aguantar todos los chistes sobre la soberbia nacional (...) uno no se reconocia, pero no te quedaba otra que hacerte cargo. Cuando volvi a Argentina me decian mexicana, por el acento. Cuando volvimos mi hermana dejo de hablar. Cada vez que para agarrar decia ¨coger¨ todos se reian. A mi me habia pasado otras veces. Que no digas agarrar en España que no te entienden, que no digas bollo en Cuba, que es concha, que no se te escape dulce de cajetacuando volviste, porque te van a mirar como una pequeña depravada. Dulce de leche, acordate. Y dulce de leche de verdad, nada de hervir en la olla a presion las latas de leche condensada. Ostia, chinga tu madre, oie brother, guàcale, còmo es que tù andas?, no seas pelotudo che. Güerita chaparra, rubia petisa. Jabao, pelirrojo. Guagua, micro, colectivo, òmnibus. Marron, cafe. Croissant, medialuna. Tortilla de papa, no existe.

Este texto viene a cuento de que hace mucho que ando con ganas de escribir algo sobre o desde el exilio, todavia no me decido, tengo algunas ideas en mente, por ahi mañana haga un ap deit de este post con mi textito, tal vez me exilie dentro de mi mismo y me salga un textazo de la ostia... Creo que lei alguna vez, (no me acuerdo si lo lei o si se me paso a mi por la cabeza), que el exilio es la peor de las càrceles, porque donde sea que te vayas, pasan varias cosas. Por empezar, siempre hay una parte tuya que se queda. Despues, esta el tema del idioma, como bien se ve en el texto de Chaves, porque por mas que todos hablemos ¨español¨ , todos hablamos latinoamericano, de un modo u otro, eso sin contar que a veces uno se raja a las apuradas y aterriza en cualquier parte, quizas, sin conocer el idioma del lugar. Ademas, por mas que en otro lado se sea mas o menos libre, y tenga el mundo entero para pasear, es terrible saber que no se puede volver. Es como una carcel, pero al reves, en vez de no poder salir, no podes entrar...