Acefalias

El señor Nam Sum pensaba que entonces, pero aun no. Debia seguir esperando para descubrir que su mujer, con su jefe, y el chofer, todos en la cama king size recien comprada. Hasta que el señor Nam Sum se canso de esperar y a continuacion salio a la calle con su escopeta doble caño a buscar al jefe y al chofer para. Pasaron tres años y el señor Nam sum sigue aqui, en esta celda, con nosotros, presos de nuestras propias cabezas. La mujer del señor Nam Sum, la señora Habes Et Sum, se quedo con la fortuna, el coche, la casa, el perro Golden, la piscina y la heladera llena de bondiola, jamon serrano y fiambrin. El Señor Nam Sum sigue esperando aqui, a que el juez. Pero no va a pasar de esta noche. Ya nosotros hemos planeado.
Ahora somos nosotros los que esperamos, aqui, junto al chofer, el jefe y el señor Nam Sum.




Pos-ter: Bater tiene razon, hay veces en que los hilos se separan cunado tenes los ojos cerrados, la birome en le balcon y el cuaderno haciendo de suplemento para un pata de la mesa ratona. Hay veces que no sabes que escribir y solo moves los dedos sobre el teclado y caen sobre cualquier tecla, y cuando pasa eso, salen cosas como el texto de arriba. Desde ya, flaca, sabes que esta explicacion no deberia estar aca, pero hoy tengo ganas de mover las manos sobre le teclado, que levachachè...